Todo lo que debes saber sobre la naranja y la vitamina C
El consumo de naranjas se asocia con la vitamina C, el otoño y los resfríos. Existen múltiples creencias y consejos alrededor de esta fruta y sus beneficios.
Es hora de despejar algunas dudas y derribar ciertos mitos sobre la naranja y sus propiedades:
- ¿La vitamina C previene gripes y resfríos?
En los meses más fríos del año es frecuente comenzar a preocuparse por el aporte de vitamina C en nuestra alimentación. Incluso hay quienes recurren a un suplemento de esta vitamina para reducir el riesgo de infecciones respiratorias. Es un mito. La vitamina C ni cura ni previene el resfrío. Actualmente la evidencia científica indica que tomar suplementos de vitamina C no reduce la incidencia de resfríos [1].
- ¿Es lo mismo comer la naranja entera que tomar el jugo?
No. Siempre es mejor comer la fruta entera, que aporta mayor saciedad gracias a su contenido de fibra. El azúcar presente naturalmente en la fruta cuando la consumes entera se considera un azúcar intrínseco. Mientras que cuando preparas un jugo de fruta se transforma en azúcar libre (está fuera de la matriz del alimento) y, por lo tanto, se debe reducir su consumo.
- El jugo de naranja, ¿hay que beberlo inmediatamente porque pierde la vitamina C?
Esta es una de las creencias más populares sobre la naranja y la vitamina C. La vitamina C presente en el jugo de naranjas no se pierde inmediatamente, sino que se conserva durante varias horas (quizás hasta 12 horas según algunos estudios) [2].
- ¿La naranja es la mejor fuente de vitamina C?
No. Ni es la mejor, ni es la única fuente de esta vitamina. Hay otras frutas y verduras que también aportan vitamina C en cantidades interesantes: kiwi, frutillas, pomelo, mango, mandarina, melón, morrones, brócoli, acelga.
Ahora ya lo sabes, es más saludable comer la naranja que tomar el jugo. Y si de prevenir resfríos hablamos, lavarse bien las manos es más efectivo que un suplemento de vitamina C.
Lic. M. Rodríguez
Abril 2019
