🥦🥔 Enfocate en ingredientes simples (versión invierno)

Cocinar rico no tiene que ser complicado. Con ingredientes de temporada —especialmente en invierno— ganás en sabor, cuidás el bolsillo y apoyás la producción local.
Te dejo algunos básicos invernales que se adaptan a mil recetas:
- Verduras de estación: Aprovechá lo que el invierno ofrece: zapallo, acelga, espinaca, brócoli, coliflor, puerro, cebolla, papa, zanahoria y repollo. Van genial en sopas, purés, guisos o tartas. Y además, se conservan bien y rinden un montón.
- Granos básicos: Arroz, fideos, lentejas, polenta o quinoa. Funcionan como base para platos calientes y reconfortantes. Con un toque de curry o pimentón y un puñado de verduritas, tenés una comida completa y con onda.
- Proteínas rendidoras: Huevos, legumbres (como lentejas o porotos), pollo o cortes económicos para guiso. Todo se puede cocinar en olla y dejar porciones listas para la semana.
- Condimentos caseros: Ajo, orégano, tomillo, laurel o nuez moscada. Con un par de estos, un plato simple se transforma en un manjar.
Al cocinar con ingredientes de estación, todo tiene más sentido: lo que hacés, lo que comés y el impacto que tenés. La cocina invernal no tiene por qué ser aburrida ni repetitiva: ¡es ideal para ponerle creatividad y sabor a los días más fríos!